Con una enorme gratitud a la familia del donante y al equipo médico que se encargó de su trasplante de rostro, el español Rafael dijo tras ser dado de alta que siente “alegría y felicidad”, y todas las ganas de retomar su vida cuanto antes.
Acompañado de su madre y de su hermana, Rafael, de 34 años, dijo en el hospital Virgen del Rocío de Sevilla: “Ahora, que me dejen en paz (...). Tengo muchas ganas de volver a mi vida normal y a salir con mis amigos”.
El pasado 26 de enero un equipo de cirujanos plásticos, maxilofaciales, anestesistas y otros médicos y personal sanitario inició una operación de 30 horas que le ha permitido volver a tener rostro.
Su cara está aún inflamada, tiene dificultades para hablar, su lengua aún no tiene una movilidad normal y no puede masticar bien. Pero el paciente ya tiene sensibilidad al dolor, distingue el calor y el frío e incluso se afeita.
Le quedan seis meses de rehabilitación, aunque ya ha dejado el hospital y ha podido visitar a amigos y familiares. En un año, su cara estará restablecida.
Rafael sufría neurofibromatosis tipo I, una enfermedad genética que provoca tumores benignos múltiples. Los padecía en los dos tercios inferiores del rostro y tenía lesiones a nivel del ojo derecho, en el que había perdido la visión.
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23/04/10 - Cambiar de cara totalmente es real
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Le quedan seis meses de rehabilitación, aunque ya ha dejado el hospital y ha podido visitar a amigos y familiares. En un año, su cara estará restablecida.
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